Sensores de calzada, qué son y para qué sirven
Actualmente las tecnologías son el máximo de todo lo que nos rodea, sin tecnología el mundo que hoy conocemos, se pararía por completo. Carreteras cortadas, fábricas paradas, electricidad suspendida... Son solo algunos de los hechos que ocurrirían si alguno de los sistemas que utilizamos fallará. Como ya hemos comentado en anteriores artículos, un anemómetro o radar de lluvia son artilugios, que en realidad forman parte de algo más complejo y grande. Del mismo modo, esto ocurre con el sensor de calzada utilizado en la meteorología.
¿Qué es un sensor de calzada?
Un sensor de calzada, es un instrumento capaz de determinar la temperatura de superficie de la calzada, el nivel de la capa / película de agua acumulado en el asfalto, la temperatura de congelación, salinidad, temperatura de sub-superficie y la condición de la carretera. De esta forma, y conectado a la estación meteorológica el sensor que dependiendo de su tipología podrá o no estar embebidos en el asfalto, siendo capaz de enviar toda la información recopilada a los centros de control para tenernos informados en todo momento del estado de nuestras carreteras. A través de esta información por ejemplo, podemos predecir posibles peligros con la suficiente antelación, incluso antes de que ocurran.
Conocer el suelo que pisamos
La razón de que estos sensores de calzada sigan existiendo a pesar de los nuevos avances automovilísticos, es que los sensores de los automóviles como el ABS, los sensores de ESP, los acelerómetros o el sensor de giro de volante, no son tan precisos como se puede creer. Aunque ya existen investigaciones sobre un tipo de sensor que permita estimar el deslizamiento y el coeficiente de fricción de la calzada y, con ello, el estado de la calzada, todavía es un proyecto muy alejado de la realidad.
Los sensores de calzada, son colocados en un punto fijo de la calzada y monitorizan el estado de la calzada a lo largo de un periodo de tiempo, realizando una media sobre todos los datos obtenidos. Podemos comprender las diferentes fases meteorológicas por las que pasa el asfalto a lo largo de un día, una estación concreta o un caso inusual. Estos sensores se dividen en dos grupos, dependiendo de su colocación:
a. Sensores Intrusivos
Su colocación es al mismo nivel de la superficie de la calzada.
1. Sensor de Carretera Inteligente y Activo ARS31Pro-UMB
Está montado al mismo nivel de la superficie de la calzada y determina la temperatura de congelación a través de la activa superficie del sensor que se calienta y enfría . El valor registrado de la temperatura de congelación es independiente de la sustancia utilizada.
2. Sensor inteligente de carretera IRS31Pro-UMB
También se instala embebido en la calzada y registra la temperatura de la superficie de la carretera, la altura de la película de agua de hasta 4 mm, la temperatura de congelación para diferentes materiales de descongelación (NaCl, MgCl, CaCl), el estado de la carretera (seco / húmedo / húmedo / hielo o nieve / sal residual / lluvia helada), la fricción (Agarre) y el porcentaje de hielo.
b. Sensores no intrusivos
1. Sensor de carretera sin contacto NIRS31-UMB
Determina el estado estado de la superficie de la calzada como: mojado, hielo, nieve. Mide la película de agua sobre el asfalto; determina el porcentaje de hielo en agua y por lo tanto de la temperatura de congelación, así como la adhesión a la calzada (fricción).